martes, 28 de julio de 2009

Un sueño roto


El sueño de su vida era ser misionero, y parecía como si finalmente se fuera a hacer realidad. Sentado en la oficina de la agencia misionera, el nervioso joven le aseguró al entrevistador que él y su flamante esposa estaban decididos a trabajar duro, administrar sus recursos como buenos mayordomos, y procurar que se proclamara a Cristo al mayor número de personas posible. Confiaban en que todo su futuro estaba saliéndole a pedir de boca.Pero pronto todo iba a parecer como si su sueño se fuera a hacer añicos. Durante su preparación para vivir entre otras culturas él y su esposa se percataron de que ella nunca resistiría los rigores de vivir en el extranjero. Ella era demasiado frágil y débil. Si iban al África, como habían planeado, era seguro que ella moriría.Confuso y destrozado emocionalmente, el joven fue a trabajar para su padre, que era dentista y que tenía un pequeño negocio colateral que producía vino sin fermentar para los cultos de la Santa Cena en las iglesias.Al envejecer su padre, el joven se hizo cargo de este negocio secundario. Un día se le ocurrió que tal vez podría todavía tocar al mundo para Cristo.Podría todavía cumplir las palabras que le había dicho al representante misionero ese día. Trabajaría duro, sería un buen mayordomo de sus recursos, y procuraría que se proclamara a Cristo a tantas personas como fuera posible; solo que lo haría de una manera un poco diferente.Mantendría su promesa sosteniendo financieramente a otros que podrían ir al extranjero como misioneros.Trabajó duro, y con el tiempo logró desarrollar la compañía en una empresa gigantesca. ¿Cómo se llamaba?

Welch.

Hoy su jugo de uva se vende en todas partes. El Sr. Welch ha ofrendado gigantescas sumas de dinero a la causa de las misiones mundiales. Irónicamente, ha hecho mucho más por la evangelización mundial que lo que podría haber hecho trabajando duro personalmente en el campo misionero. Debido a que se adaptó a sus circunstancias y floreció en donde estuvo plantado, llegó a ser un compañero valioso de las misiones en todo el mundo.
Cuando una puerta se cierra, no te des por vencido, quizas hay otras puertas que no haz visto y que se abrirán para hacer incluso mucho más de lo que inicialmente habías pensado. Cuál fue la última puerta que se cerró?Ya encontraste la nueva puerta? No olvides con Dios siempre hay nuevas puertas delante de nosotros.De cierto te bendeciré grandemente, y multiplicaré en gran manera tu descendencia como las estrellas del cielo y como la arena en la orilla del mar, y tu descendencia poseerá la puerta de sus enemigos. Gen 22:17Conozco tus obras. Mira que delante de ti he dejado abierta una puerta que nadie puede cerrar. Ya sé que tus fuerzas son pocas, pero has obedecido mi palabra y no has renegado de mi nombre. Apoc 3:8

viernes, 26 de junio de 2009

COMO IDENTIFICAR LO GENUINO DE LO FALSO



¿Cómo identificar lo genuino de lo falso? Es una pregunta que nos hemos hecho muchas veces, más si somos jóvenes cristianos criados en familias cristianas conociendo solo lo correcto. En este mundo hay una constante lucha entre el bien y el mal, aunque todas las personas saben que lo correcto es hacer el bien, siempre se inclinan por el mal, ¿Por qué? Porque hay una inclinación en sus corazones hacia lo incorrecto. La razón es que no conocen a Dios, y aunque muchos afirman que existe, es como si lo ignoraran. Pero me voy a enfocar en los jóvenes cristianos criados en familias cristianas. Siempre en la iglesia, hasta con privilegios, con amigos solo cristianos, pero se hacen esta pregunta ¿Cómo identificar lo genuino de lo falso? La respuesta es sencilla, si estamos sumergidos en la Presencia del Señor, si le conocemos, si le amamos, si estamos completamente entregados El, y ha habido una conversión genuina en nuestros corazones,( entiéndase conversión no convicción, porque convencernos a nosotros mismos es facíl, pero que El Señor realmente nos haya encontrado es algo muy diferente.) vamos a poder identificar lo falso con facilidad.
Hace un tiempo que trabajo en un banco de cajera, y al principio mi principal aflicción era,” ¿Cómo voy a identificar los billetes falsos? Nunca en mi vida he visto un billete falso, y si recibo uno voy a tener que pagarlo”.
Pero con el pasar del tiempo me fui dando cuenta que mientras más me familiarizaba con los billetes genuinos, era más fácil identificar uno falso.
Y en el tiempo que tengo de trabajar han llegado muchos billetes falsos y los he identificado con facilidad, sin antes haber visto ninguno, solo viendo día a día los billetes genuinos.



Así debemos ser en nuestra vida espiritual, si estamos completamente entregados al Señor, vamos a vivir una vida llena de paz y de gozo, y cuando las tentaciones y dificultades vengan a nuestra vida, vamos a poder decir NO! e identificar con facilidad cuando algo no es del Señor.
Algo que me ha molestado siempre es escuchar a jóvenes “cristianos” de nacimiento, incluso hijos de pastores, decir que como van a identificar lo malo si nunca han estado en el “mundo”, que para ver el mal, tienen experimentar, el bien y e mal. Y tiempo después han salido mal, de sus casas, y después de experimentar la “basura” de este mundo han vuelto a sus casas, humillados, con su moral por el suelo, suplicando a sus padres que les den otra oportunidad, queriendo acercarse al Señor, después de haber perdido la oportunidad de Conocerlo y hacer las cosas bien desde el principio.
Yo les animo a que busquen al Señor, que le amen con todas las fuerzas de su corazón, porque El es lo mejor que pueden conocer, no hay nada mejor que estar en Su Presencia.